sábado, 4 de agosto de 2012


 CUENTOS DE HADAS

A pesar de la gran acogida que suele tener el género fantástico entre el público adolescente no dejo de escuchar críticas dudando sobre la aportación de estas obras a la literatura, así que hoy pretendo refrescar unas cuantas memorias. Frases como: "no es mi género", "literatura para frikis" o "cuentos de hadas", desfilan por la red refiriéndose a este tipo de literatura, y aún más, en mi búsqueda de agente literario me encontré con una barrera infranqueable por parte de muchas agencias y editoriales que descartaban representar a los autores de dicho género, así que voy a dejar aquí varios nombres de escritores, que yo creía fundamentales, y con la que los mismos críticos, agentes y editores, se han llenado la boca más de una vez para dejar claro su nivel intelectual. A ver si recordando a algunos de los precursores de este tipo de literatura, con sus cuentos de hadas, aventuras y terror, vuelven a repetir la coletilla tan alegremente o se lo piensan dos veces.
Empezaré con una mujer, un nombre de sobra conocido por todos, Mary Shelly. Su novela más laureada lleva por título Frankenstein y ha inspirado varias adaptaciones teatrales y cinematográficas. ¿Quién se atrevería a tildar esta obra o a su autora de frívola?
Los siguientes en mi lista tuvieron que explicar en su momento, como nosotros ahora, que sus cuentos no estaban escritos para mentes infantiles. Fueron duramente criticados por alusiones sexuales, o simplemente porque una madre no podía exhibir un comportamiento como el que describían, se veían obligados a cambiar el papel por el de madrastra (Hansel y Gretel). ¿Les suena el título?, ¿no?, quizá alguna de estas otras: La bella durmiente, Pulgarcito, Blancanieves...¿Quién no ha leído a los hermanos Grimm, creadores de cuentos por excelencia?
Los sueños se hacen realidad cuando hablamos de Julio Verne. El submarino, el helicóptero, y las naves espaciales, todos estos inventos y algunos más, los plasmó en sus escritos antes de que fuesen una realidad. Quizá algún lector podría pasar sin leer las obras de este gran maestro, pero apuesto a que ninguno de los que reniega de la literatura fantástica ha levantado la mano.
Podría seguir nombrando autores de cuentos para niños de mente adulta, como Lewis Carrol (Alicia en el país de las maravillas), James Matthew Barrie (Peter Pan), y tantos otros que harían que la lista fuera interminable, pero tengo el convencimiento de que al llegar a este punto, todo el que reniegue de la fantasía y los cuentos de hadas, habrá empezado a sentir vergüenza de sus propias palabras. Les recuerdo a todos ellos que nunca es tarde para rectificar.

9 comentarios:

Lorenzo dijo...

Antes que nada tengo que aclarar qeu Frankenstein a mi me parecio caca de la vaca xD
Estoy de acuerdo contigopero me parece que faltan ejemplos para sostener lo que piensas porque Verne y Frankenstein son fantasía, si, pero basada en la ciencia y teóricamente eran posibles de realizar esas hazañas, no son un ejemplo muy claro.
Y con lo de cuentos infantiles no tengo nada que decir pero hecho en falta por ejemplo la Biblia, el libro de fantasías más leido de la historia.
Toma parrafada xD

Khamair dijo...

yo creo que más que simplemente fantasía lo que buscan las editoriales es algo de lo que estén 100% seguros que va a ser un éxito.

Además esto va en función de las modas. Cuando salió crepúsculo todo eran vampiros (y si tenías la suerte de haber hecho una historia sobre ellos podías tener una oportunidad de publicar), después fueron los juegos del hambre que sembraron un mundo de distopias en el que te ahogabas. Así que hasta que no haya un boom de fantasía, por desgracia, esas historias seguirán mirándose mal (por lo menos las escritas por españoles, por supuesto xD)

Jongu dijo...

Esto es como todo. Los libros de amor son para chicas, los de más acción son para chicos, los de historia son para adultos y los de fantasía son para niños. Pues no. Yo leo lo que quiero, y nadie tiene por qué meterse en mis gustos. La fantasía es uno de esos grandes géneros incomprendidos. ¿Quién no ha oído que Memorias de Idhún es para niños? Pues a mí me gusta, y si quiero lo releeré a mis 16 años.

Me ha quedado muy borde, pero con estas cosas me enciendo mucho, y estoy totalmente de acuerdo contigo.
¡Besos!

PD: Me está gustando mucho el comienzo de tu novela, ¡pinta muy bien!

Alkiio dijo...

Yo creo que está mal despreciar un tipo de literatura sólo debido al público al que va dirigida. Hay muchos adolescentes que son capaces de razonar incluso mejor que algunos adultos (bastantes). Además, porque la fantasía sea el género, no quiere decir que no haya conflictos sociales importantes ocualtos entre las páginas.

Besos

Chris J. Peake dijo...

Ole por Gala!
Muy buena defensa de la fantasía, en todos sus subgéneros.
Es cierto que nos discriminan, nos tildan de infantiles (como si ello fuera negativo o con poco potencial comercial), pero estamos aquí, y seguimos escribiendo.

Un saludo, encantado de leerte,
Chris.

Unknown dijo...

EPITAFIO.Lamento presentarme así,por la puerta de atrás y sin avisar,pero en la principal hay un armario de dos por dos que no me deja entrar.Mis disculpas anticipadas.He intentado dar el anuncio de mi retiro a Loren,espero le haya llegado.Solamente quería sacarme una espinita contigo,Gala.Me retiro,no quiero dar quebraderos de cabeza al chaval.Amén de un ojo morado,contusiones varias y un mordisco en la tibia,estoy demasiado mayor para esto.Un último favor te pide este boxeador que está colgando los guantes.Piénsalo dos veces antes de usar de manera gratuita el término misógino,por favor.A los que somos atletas de fondo en la defensa de la mujer nos duele.Es más,te diré que reconozco superioridad fémina,frente a la triste condición masculina,en la mayoría de facetas en la vida.Quizá es eso mismo,el listón tan bajo que dejamos,lo que provoque dicha superiorida.No lo se,divago.Último deseo?.Arrojad mis restos,con dos monedas para Caronte,al Ganges del ciberespacio con los acordes de "starway to heaven" de fondo.Mi fantasma seguirá asomándose a tu blog,de lejos,en el banco de un parque,con un periódico abierto y dos agujeritos para los ojos.Adiós,guapa,hasta siempre.PD:no te preocupes por "lo nuestro",siempre nos quedará París.

Gala Romaní dijo...

Quizá si no hubieses dicho que tu también recitabas a Neruda para meter la mano debajo de las camisetas de las chicas, y que los halagos a la forma de escribir de Lorenzo eran todos de niñas que estaban locas por el, no te habría tildado de misógino,me parece un poco fuera de contexto teniendo en cuenta que casi todas las personas que siguen el blog son menores. En mi blog eres bienvenido, a mi nadie me dora la píldora, así que es difícil herir sensibilidades. Siento que hayamos empezado con mal pie, parece que en el fondo quizá no entendí tus ironías, aunque no fui la única, alguna que otra se cortó a la hora de cantarte las cuarenta, y a mi entender hubiesen tenido razón. PD: Portugal es más barato y me queda más cerca, te llamo desde allí si eso.

Unknown dijo...

"STAIRWAY TO HEAVEN",comentario recibido,pensaré en ello.(pisotones de elefantes)

Lorea Garcia dijo...

Yo hago mi pequeña aportación; Creo que nadie se atrevería a decir que todo lo que ha escrito Tolkien es para niños, o Alice Cooper una de las mejores escritoras de literatura fantastica ( a mi parecer ) que han existido y con la que se han llenado los bolsillos. Lo que sucede es que para poder triunfar, te tienes que llamar.... pues eso, ser famoso, aunque lo que escribas sea bazofia (sea fantasia, ficción, suspense....) con todos mis respetos. No apuestan por nuev@s autore/as porque no se quieren arriesgar, prefieren pelear por algo malo y conocido que bueno y por conocer. Es nuestra cruda realidad en el mundo de la fantasia, la cual espero que en un futuro no muy lejano haya cada vez más adeptos. Por mi parte ánimo a la gente a leer este tipo de literatura porque escribir sobre un crimen puede llegar a ser sencillo (es escribir sobre datos existentes), pero la fantasía es algo que solo el autor la tiene en su mente. Que grande!!!! ese maravilloso mundo que nos hace olvidar lo cotidiano.